Zentzuz Kontsumitu participó el pasado fin de semana del 10 y 11 de noviembre en las I Jornadas de Trabajadoras de Hogar y de Cuidados en Lucha en Bilbao. Durante dos días tuvimos la oportunidad de debatir, compartir ideas y planificar acciones de futuro con más de 18o mujeres de diferentes puntos del Estado español y de América Latina que, pese a sus diferentes experiencias, comparten un objetivo común: la lucha en defensa de los derechos de quienes, en nuestra sociedad, asumen el cuidado de las personas.
En las jornadas organizadas por Mundubat y en cuya organización ha colaborado ZK, se socializaron diferentes experiencias que se están llevando a cabo en este sector, tales como la realización de investigaciones y el desarrollo de procesos de organización colectiva; también conocimos de primera mano historias de vida y la lucha de algunas compañeras; además hubo talleres participativos y actividades culturales orientadas a seguir profundizando en la temática. Zentzuz Kontsumitu tuvo la oportunidad de dar a conocer el estudio realizado en 2017 en Vitoria-Gasteiz titulado ¿Quiénes y cómo cuidan en Vitoria-Gasteiz?
Las mujeres trabajadoras de hogar y de cuidados fueron las protagonistas indiscutibles del encuentro, que estuvo además abierto a más compañeras aliadas-cómplices de otros colectivos, instituciones y/o sectores.
El encuentro sirvió para reafirmarnos en la idea de que hay problemáticas comunes entre el Norte y el Sur global y de que existe una reivindicación compartida: lograr unas condiciones dignas para las trabajadoras de hogar y de cuidados, de cualquier lugar del mundo.
Las participantes en el encuentro concluyeron con un NOS DECLARAMOS EN REBELDÍA y abogaron por un objetivo: EL FIN DEL TRABAJO ESCLAVO. Porque, como denunciaron algunas con sus testimonios, el trabajo esclavo todavía es una realidad en nuestro entorno. Entre sus reivindicaciones más concretos, exigieron al Gobierno español que este trabajo se incluya en el Régimen General de la Seguridad Social, lo que les permitirá tener derecho al paro, a la pensión, contratos legales, baja por enfermedad, maternidad; alzaron también su voz para reclamar a la sociedad que visibilice y reconozca este trabajo que, pese a estar poco considerado, es imprescindible y esencial para el mantenimiento de la sociedad. Y pidieron también una reflexión al interior del propio colectivo. Porque,como concluyó Josefina, una de las mujeres participantes: ¿Por qué una mujer que por 40 años ha sido el pilar económico de su familia no se ve como una mujer trabajadora?