Queremos pararlo todo y romper con la normalidad diaria. Por eso, el objetivo es que todo esté cerrado.
El 8 de marzo llamamos a cerrar los comercios y a no consumir en aquellos que estén abiertos, tanto a mujeres* como a hombres. Necesitamos a todas las mujeres* movilizándose en las calles, y a los hombres haciéndose cargo de todos los trabajos de cuidados que nosotras no haremos.
Además, queremos impulsar una reflexión sobre el modelo de consumo que va más allá de la huelga feminista: ¿Cómo se produce y comercializa lo que consumimos? ¿En qué condiciones de trabajo? ¿Se han explotado trabajadorxs o recursos naturales de otros países? ¿Se ha reforzado el tejido productivo local? ¿Se ha impulsado una producción agrícola que construya la soberanía alimentaria de Euskal Herria? ¿Se ha garantizado una contratación sin discriminaciones por razones de género?.
Hacemos un llamamiento a desarrollar un consumo responsable y sostenible. ¡Plantémonos ante las empresas que son símbolo de explotación laboral, las que cosifican en su publicidad a las mujeres*, las que generan la miseria de otros pueblos! ¡El 8 de marzo y todos los días!
Pautas para el sector de comercio y hostelería de cara al ocho de marzo:·
EUSKAL HERRIKO MUGIMENDU FEMINISTA